Museo de Bellas Artes de Valencia

El Museo de Bellas Artes de Valencia se ha convertido en uno de los referentes museísticos más importantes de la Comunidad Valenciana. Desde su fundación (en 1837) hasta nuestros días, ha sido testigo de la historia de la ciudad y el desarrollo de su cultura. Está formado fundamentalmente por una grande y valiosa pinacoteca, así como un amplio fondo de dibujos y grabados, así como esculturas, piezas arqueológicas, fragmentos arquitectónicos, fotografía y artes decorativas.

Este centro de arte está ubicado en el antiguo Colegio de San Pío V, sede también de la Real Academia de San Carlos, aunque inicialmente fue pensado para formar a futuros sacerdotes. Está compuesto por dos partes –el colegio y el templo- y disfruta de unas incomparables vistas al cauce del río Túria, actualmente ajardinado y de activa vida ciudadana, y cercano a los Jardines del Real.

El Museo de Bellas Artes valenciano está considerado por su importancia artística el segundo de España, y ha gozado siempre de mucho renombre por la calidad de sus obras y la cantidad de piezas expuestas. En su interior destacan especialmente los cuadros de su sala dedicada al pintor Sorolla, y la Sala de pintura gótica.

En este museo destaca también la instalación museográfica del Patio del Palacio del Embajador Vich, ahora situado en el interior del centro. El valenciano Jerónimo Vich y Vallterra (1459-1534) fue embajador de Fernando el Católico y Carlos I ante el Vaticano. Su estancia en Roma le permitió conocer el nuevo estilo imperante en Italia: el Renacimiento. A su vuelta a Valencia, decidió la construcción de su Palacio adaptándolo a la nueva corriente creativa. En el patio interior podemos apreciar elegantes columnas clásicas, capiteles, arcos, frontones… estableciéndose así como una joya única del Renacimiento valenciano.