El Museo Garnelo de Montilla nace como unión entre el coleccionismo privado y las instituciones públicas con un objetivo claro: dar la relevancia que se merece a la figura de José Garnelo, uno de los artistas más destacados de la pintura española. Este pintor supo adecuar su obra a los nuevos movimientos artísticos europeos: las vanguardias. Partiendo de los últimos destellos del arte decimonónico, se emprendió en la investigación de nuevos planteamientos estéticos sin renunciar a lo que él consideraba ‘valores imperecederos’ en la pintura. Guiado por esta idea, el artista se ratificó en su propio programa compositivo.
Educado en la Pintura de Historia, José Garnelo supo adoptar una postura receptiva con las nuevas tendencias artísticas, fomentando con su conducta el desarrollo de la pintura española y renovando con sus planteamientos pedagógicos la docencia artística. Se implicó de lleno en el análisis de la figura en movimiento y la práctica del dibujo de memoria, novedosos en la época y muy alejados de los sistemas de estudio convencionales. Obtuvo múltiples distinciones y premios como la Primera Medalla de la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1892, la Medalla de Oro en la Exposición Universal de Chicago de 1893 y la Mención de Honor lograda en el Salón de París en 1896, entre muchos otros. Además, fue pensionado de la Academia Española de Bellas Artes en Roma, Académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Subdirector del Museo del Prado y Pintor de la Corona, entre otros honores.
El 5 de noviembre de 1999 un grupo de coleccionistas privados se comprometieron a ceder 50 obras originales del pintor, representativas de las distintas etapas creativas del artista, para definir el contenido inicial de la colección. Así pues, el recién creado Museo Garnelo de Montilla fue enriqueciendo progresivamente dicho fondo histórico con nuevas obras. Por otra parte, el Ayuntamiento de Montilla adquirió la «Casa de las Aguas» -un bello inmueble del siglo XIX- para configurar un ambicioso centro cultural donde tuviese su sede el museo.
Actualmente los fondos del Museo Garnelo ocupan ocho salas de la Casa de las Aguas, el vestíbulo y la escalera principal de acceso a la primera planta del edificio, así como cuatro galerías acristaladas que dan a un precioso patio interior. Las 180 obras que componen la colección se han seleccionado cuidadosamente para que el visitante pueda observar en su recorrido las diferentes etapas y múltiples facetas de la pintura del artista.
En las salas se han incluido dibujos, acuarelas y, sobre todo, una magnífica colección de óleos. Mediante estas piezas obtienen representación las diversas temáticas que fascinaban al artista: pintura religiosa, de historia, mitológica, alegórica, costumbrista o de paisajes. También en los retratos demostró especial valía, hasta el punto de ser nombrado Pintor de la Corona, y algunas de estas obras pueden admirarse en el Museo Garnelo.
Por otra parte, el Museo Garnelo programa exposiciones temporales y diferentes actividades con el objetivo de promocionar la cultura y la obra del artista en el ámbito nacional, y en el entorno especializado de los pintores e historiadores del arte.
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