Hay artistas a los que les gusta ser reconocidos y hay artistas que prefieren pasar desapercibidos y que sea su arte, el que hable de ellos.
No creemos que una opción sea mejor o peor que la otra, ni tampoco estamos a favor de una en detrimento de la otra, pero el artista que hemos descubierto es digno de mención. De hecho, basa su arte y la totalidad de su obra en eso exactamente, en camuflarse.
Es el caso del artista chino Liu Bolin, el cual ha convertido en un arte, la capacidad de mimetizarse con el entorno. Da igual que sea un río, una finca, una obra urbana, o un cielo, su capacidad de adaptación no tiene límite.
Su trabajo no es sencillo. Hay que tener en cuenta que para conseguir ese nivel de realismo, la minuciosidad de su trabajo debe ser extrema.
Liu Bolin explica el origen de su obra en el cierre del pueblo de artistas Suo Jia Cun, en Beijing en el año 2005, y en la demolición de sus más de 100 talleres de arte, entre ellos el del propio Liu.
Como protesta, inició una serie de fotografías que bajo el título «escondido en la ciudad», trataban de mostrar como se puede sentir la gente en su situación, ya que sienten que pueden desaparecer por completo.
Realiza su trabajo ayudado por un auxiliar que es quién le integra mediante la pintura, con el entorno. Fundido con la propaganda del partido, en un centro comercial delante de la estantería de latas, integrado con un edificio o el cielo…
Una obra realmente expectacular y digna de mención.
Esperamos os haga disfrutar tanto como a nosotros.
¿Y tu? ¿Que opinas de este tipo de obras de arte? ¿Las consideras arte como tal?
Productos recomendados
Deja una respuesta
No hay respuestas hasta ahora. Se el primero en dejar una →